La OCD, ha acompañado los procesos electorales de 2020, 2021 y 2024 mediante estudios de integridad que evaluaron si las actividades del calendario electoral se desarrollaron con eficiencia, legalidad, transparencia, igualdad y sin presiones externas. Estos análisis permitieron identificar riesgos, desafíos y vacíos normativos, cuyos hallazgos y recomendaciones fueron presentados al Tribunal Supremo Electoral (TSE) y publicados en reportes ciudadanos como parte del ejercicio de vigilancia democrática.